Aunque este tema se titula "Narrativa hispanoamericana en la segunda mitad del siglo XX", nos es necesario dar un paso atrás y, al menos, comentar qué es eso de literatura hispanoamericana. Aunque no es este el sitio de profundizar en ningún tema, es útil recordar que la literatura hispanoamericana, es decir, la literatura en lengua española independientemente del país en que se publique, empieza a considerarse en el siglo XVI, la centuria de la conquista de América por parte de los españoles. Grandes plumas desde entonces recuerdan la preferencia por el seguimiento de las tendencias de mayor auge en la "madre patria", ya fuera el Inca Garcilaso de la Vega, de insignie nombre también por aquellos lares, o el preciosismo culterano de sor Juana Inés de la Cruz. Pasados los tiempos coloniales, con su dominación, el siglo XIX trae a América influencias francesas: el Romanticismo, el Realismo, y una joven poesía que a finales del siglo tiene raigambre en América en las figuras de José Martí y, sobre todo, Rubén Darío; era el Modernismo. Por primera vez un movimiento nos llega de América y no es exportado desde España. A partir de ese momento la importancia de la literatura hispanoamericana no ha dejado de crecer en nombres como Borges, Neruda, Huidobro, García Márquez, el reciente Nobel Vargas Llosa, Cortázar y muchos más que no podemos listar por razones de extensión. La lengua española se desarrolla ampliamente gracias, entre otras cosas, a los más de cuatrocientos millones de hispanohablantes que abandonando viejas premisas como la de la "lengua del imperio" leen a Skármeta, Benedetti o Laura Esquivel.
Vicente Huidobro |
Sor Juana Inés de la Cruz |
Jorge Luis Borges |
La narrativa, en concreto, es una de las perlas de ese tesoro lingüístico hispanoamericano. Veremos en este tema cómo hasta la década de los años cuarenta, más o menos, se mantiene fiel a temas y estilos propios de lo americano (novela indigenista, novela regionalista) pero más tarde se universaliza, se extiende rápidamente por su originalidad, su diversidad de estilos, también por un descubrimiento editorial -acaso mercantil- pero, sobre todo, por su calidad. Sin olvidar que la vuelta al cuento, a la narrativa breve (a veces hasta micronarrativa), es una de las tendencias más importantes del siglo y un elemento que llega hasta nuestros días.
Narrativa hispanoamericana en la primera mitad del siglo XX
En el Modernismo, el cuento era un vehículo de expresión perfecto para mostrar el esteticismo del movimiento ya fuera con temas fantásticos como los cuentos de Leopoldo Lugones (Las fuerzas extrañas, 1906) o los misterios de Horacio Quiroga (lee El almohadón de plumas si te gusta Poe). Pronto el realismo entra en escena a través de una serie de novelas que muestran la realidad americana. Son: a) la novela regionalista o de la tierra, que habla del determinismo que une al americano con el medio ambiente en el que vive, cada uno intenta dominar al otro y termina siendo una invitación a la barbarie (Rómulo Gallegos, Doña Bárbara); b) la novela social, narrativa en la que caben novelas de la revolución como las de Manuel Azuela y novelas indigenistas como las de Jorge Icaza donde los derechos del indio a sus tierras son narrados desde una perspectiva mágica como las novelas del "boom" hispanoamericano.
Narrativa hispanoamericana de la segunda mitad del siglo XX
La inmigración europea tras las guerras en este continente determinaron un crecimiento exponencial de las ciudades y un cambio de costumbres para muchos de los habitantes americanos. La novela de "lo nuestro" que se había realizado hasta ahora no tenía cabida en la nueva forma de narrar que tiende a romper con el realismo tradicional al incluir elementos mágicos que representan a una colectividad (es el inicio de lo que se dio en llamar "realismo mágico" o "lo real maravilloso"). Alguna de las características de estas nuevas narraciones también se han producido en nuestro país en la posguerra, por ejemplo, el afán por indagar en la existencia del individuo, en su problemas como individuo y en sus miedos. Es esta una literatura estética en la que la metaliteratura, la parodia, la ruptura del tiempo o el uso singular del narrador adelantan el posmodernismo en España a través de las primeras publicaciones en Barcelona y Madrid de García Márquez, Cortázar o Vargas Llosa.
Se suelen señalar tres tendencias generales en esta narrativa de la segunda mitad de siglo. Son la novela metafísica, la existencial y la del realismo mágico.
- La novela metafísica es aquélla en la que se busca trascendencia a los problemas del hombre. Los nombres más destacados son Jorge Luis Borges y José Lezama Lima. Borges, argentino, poeta, conocedor del Madrid de principios de siglo y narrador excepcional escribió obras de grato recuerdo como Ficciones, Historia universal de la infamia o El aleph (pincha aquí si quieres leer el cuento homónimo). Sus cuentos, dictados pues ya su débil visión le impedía la lectura y la escritura, están plagados de autores que no son más que recreaciones del doble y la copia de todos nosotros, inmensas bibliotecas o laberintos y una pudorosa selección del lenguaje.
Aleph, la primera letra del alfabeto protocananeo. |
Lezama Lima, barroquista narrador cubano, dejó en Paradiso una biografía existencial de su protagonista, lo que le granjeó algunos problemas por tratar el tema de la homosexualidad. http://www.elpais.com/articulo/portada/Jose_Lezama_Lima/Lezama/Lima/Paradiso/elpepuculbab/20101127elpbabpor_30/Tes
Juan Carlos Onetti |
- La novela existencial entronca con la literatura que en los años cuarenta y cincuenta se está haciendo en Europa al preocuparse de la condición humana. Son Juan Carlos Onetti y Ernesto Sábato los autores más destacados de esta tendencia con obras como La vida breve (del uruguayo Onetti) o El túnel (angustia vital contada por Sábato).
- La novela del realismo mágico. Alejo Carpentier, uno de sus iniciadores, la llamaba de "lo real maravilloso" por ser permeable al irracionalismo de lo mágico desde la perspectiva del realismo. Sus características principales vienen determinadas por la influencia de tendencias extranjeras, como la renovación de Kafka, Lloyce o Faulkner -de los que se toman el monólogo interior, la anacronía, etc.- , el surrealismo europeo -del que se toma el onirismo y la capacidad de superar la realidad- y otras.
Los iniciadores son Miguel Ángel Asturias y Alejo Carpentier con obras como Señor Presidente (del novelista guatemalteco Asturias) en la que se habla del dictador tipo de América, o El siglo de las luces (del cubano Carpentier) donde se relata la revolución americana.
En la década de los sesenta se produjo el "boom" hispanoamericano y Europa acogió la obra de muchos de los autores del realismo mágico (amén de ensayistas y novelistas de otras tendencias). Los nombres más destacados de ese momento son Juan Rulfo, Julio Cortázar, Gabriel García Márquez, Carlos Fuentes y Mario Varga Llosa.
Los grandes nombres:
Juan Rulfo. Este novelista mexicano es autor de dos únicas obras: Pedro Páramo y El llano en llamas (cuentos). La primera es su obra más representativa y se publicó en 1955. Su tema no es novedoso puesto que trata la revolución mexicana pero sí su renovación estilística pues incluye rupturas temporales, monólogos interiores, etc. La historia relata el viaje de un hijo que busca a su padre muerto, Pedro Páramo, también desde la muerte en un diálogo de tumbas.
Fragmento de la película basada en Pedro Páramo: http://youtu.be/GGsZTh_HWPU
Julio Cortázar |
Gabriel García Márquez. Sus primeras novelas tanteaban el encuentro del escritor con el lugar mítico de una de sus mejores novelas, Macondo en Cien años de soledad (1967).
"Muchos años después, fente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo."
En esta obra el autor colombiano presenta una saga familiar, la de los Buendía, que fundan, constuyen y se pierden en Macondo como el ser humano ante sus propias tragedias. La muerte está presente en cada esquina del pueblo jugando al escondite con una vida que se muestra complementada con la magia de lo sobrenatural americano. Formalmente es una novela que bebe de la renovación narrativa del siglo XX. Como ejemplo, el episodio del hielo, para García Márquez el germen de la novela (aunque está hacia la mitad de la misma), que nos recuerda sobremanera el inicio de La metamorfosis de Kafka, obra cuya lectura sobrecogió e inspiró al autor.
Sobre García Márquez y Kafka: http://docs.google.com/viewer?a=v&q=cache:-xtZbSXg0H8J:logia.it/index2.php?option%3Dcom_docman%26task%3Ddoc_view%26gid%3D13%26Itemid%3D74+garc%C3%ADa+m%C3%A1rquez+cien+a%C3%B1os+de+soledad+kafka&hl=es&gl=es&pid=bl&srcid=ADGEESjTx1dgouZm1OFBcyNxeD0gd9v10JW-MdNNWmAxpa_Pd5aXWCvFwdqxuU14zgavBLFBGNVmDCJsmmbP5H9ZRf1LZRHNNM-mfpUMe5boaTFg9VlBTRmaaAcOexjspYsbyYz1qCvT&sig=AHIEtbROHxNPccGy7kgL7WIszFwClpxyJg&pli=1
Otras novelas del autor de Aracataca son: El coronel no tiene quien le escriba, El otoño del patriarca , Crónica de una muerte anunciada, El amor en los tiempos del colera...
Carlos Fuentes. En La región más transparente une lo diacrónico y lo sincrónico y en La muerte de Artemio Cruz ofrece una visión crítica de la revolución mexicana. Innova formalmente al presentar tres personas narrativas diferentes en la narración del relato.
Mario Vargas Llosa |
Mario Vargas Llosa. El escritor peruano y español, Premio Nobel 2010 (uno más de entre los muchísmos Nobel que hay en estas páginas), utiliza su propia biografía como materia novelable en sus primeras obras (La ciudad y los perros o La tía Julia y el escribidor). En pleno auge de la novela experimentalista publica narraciones como Pantaleón y las visitadoras o Conversación en La Catedral, de una complicación técnica evidente. Es un autor que ha sabido amoldarse a todas las tendencias hasta nuestros días.
No podemos olvidarnos de otros autores de novela y cuento como Mario Benedetti, Laura Esquivel, Cristina Peri Rossi, Antonio Skármeta o Augusto Monterroso:
"Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí"
Las últimas tendencias son: la novela y los medios de comunicación social (donde la novela es un medio más y el novelista, un comunicador) con nombres como Alfredo Bryce Echenique, y la metanovela (en la que el lugar estético de la narración sigue siendo preponderante en nuestra sociedad), con ejemplos como la producción del mexicano Salvador Elizondo.
Terminamos el tema ofreciendo unos enlaces a una serie de cuentos hispanoamericanos:
Borges, "Funes el Memorioso" en Ficciones: http://www4.loscuentos.net/cuentos/other/3/19/158/
Benedetti, "Los novios" en Montevideanos: http://www4.loscuentos.net/cuentos/other/2/5/83/
Monterroso," La oveja" en La oveja negra y demás fábulas:
http://biblio3.url.edu.gt/Sopa/2010/OvejaNegra.pdf
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